lunes, 25 de junio de 2018

El tiempo y la dedicación como factor diferencial en la inversión

La colectividad, en general, tiende a tener una percepción de la inversión en bolsa, y de los que en esta actividad participan, casi mística, y nada más lejos de la realidad. La inversión en empresas, como cualquier actividad profesional, tiene sus reglas, sus máximas, que hay que conocer. Se requieren unos conocimientos mínimos, por supuesto, pero al final el factor diferencial del buen inversor es la cantidad del tiempo dedicado a elaborar las tesis de inversión, a saber, en general, y la calidad de dicha dedicación (p. ej., mirar ocho horas al día las gráficas del IBEX 35 no aporta demasiado).

Tiempo y dedicacion e inversion

- La dedicación total a la inversión, el ejemplo de Peter Lynch


Escuchando una entrevista a Álvaro Guzmán de Lázaro, en la que nos contaba que iban a abrir oficina en Londres (Álvaro es uno de los gestores del fondo de inversión AZ Valor), comentaba, acerca de lo que estamos tratando en el artículo, el ejemplo de Peter Lynch.

Peter Lynch fue uno de los inversores más exitosos en fondos de inversión. Durante su carrera profesional, logró unas rentabilidades medias de algo más del 29% (además, comentaba en uno de sus libros, Un paso por delante de Wall Street, no tuvo ningún año de rentabilidades negativas). Y se retiró pronto, rondando los 50.

¿Por qué se retiró el Sr. Lynch a una edad tan temprana? Pues básicamente porque el nivel de exigencia de la élite de los inversores es muy grande, en su caso contestó que para dedicarte a esto profesionalmente había que dedicarle 15 horas diarias.

Quizás su caso era algo extremo, ya que llegó a tener en cartera, en la cartera del fondo Magellan, que era el que gestionaba en Estados Unidos, más de 1000 compañías. Pero, en cualquier caso, y por lo que cuentan los gestores más exitosos en España, no es algo fuera de lo común, sino bastante habitual.


- Saber, esencial en la inversión


Para invertir hay que saber contabilidad, hay que entender cómo funciona la bolsa, la volatilidad, por qué suben y bajan las acciones. Eso es algo que se puede aprender relativamente rápido. Sin embargo, lo que hace brillar a un gestor no es saberse de memoria las cuatro cosas de la inversión en bolsa, sino saber mucho sobre muchas empresas y sectores.

Un buen inversor no invierte, como propugna Warren Buffett, en aquello que está fuera de su círculo de competencia. Si quieres poder invertir en muchos sectores, deberás ser capaz de saber lo suficiente (mucho) de esos sectores.

Incluso leer sobre otros temas puede llegar a ser útil. Al final leer es vivir otras vidas, y en la bolsa participan personas de carne y hueso de muy diferentes países y culturas. Y son también personas, con las particularidades de cada país y gobierno, las que consumen, o no, los productos de según qué empresas (si una empresa se propone vender jamón de bellota en una país 100% musulmán, y nosotros sabemos que dicho país no consume cerdo, nos abstendremos de invertir en la misma, por poner un ejemplo extremo).

- No saber: el principal riesgo en bolsa


Hay que ser honesto con uno mismo, si invertimos en una empresa que no conocemos, no estamos invirtiendo, estamos haciendo una apuesta. Igual tenemos suerte y la empresa está infravalorada, crecen sus beneficios y nuestro patrimonio aumenta, o igual no.

Si nos dedicamos en serio a invertir, debemos ser conscientes de que el riesgo se puede reducir considerablemente si tenemos los suficientes conocimientos. Si sabemos que esto es así, tiene lógica que un inversor que dedica 12, 14 o 16 horas diarias a aumentar sus conocimientos tienda a reducir el riesgo en sus inversiones a su máxima expresión.

Si no estamos dispuestos a dedicarle el tiempo que requiere la actividad inversora, o no podemos dedicárselo, haremos bien en delegar en alguien que sí pueda hacerlo, al final las comisiones, en comparación al riesgo que dejamos de sufrir, derivado del desconocimiento, serán poca cosa.

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Por Javier García de Tiedra González, Graduado en Derecho por la Universidad de Cádiz.